through europe

The arrest of Julian Assange sounds the death knell for Western democracy. They caught him, they cut off the wires and the funds. But what did this man exactly do? Simply demonstrate the power of the Network. Western authorities, despite their disdain for Chinese Censorship, behave exactly like Hu Jintao as soon as the power of the networks threatens to introduce Glasnost, to suggest any form of transparency or even, perhaps, expose the realities of power.

L’arresto di Julian Assange suona campane a morto per la democrazia occidentale. L’hanno acciuffato, gli hanno tagliato i fili e i fondi.  

Cos’ha fatto quest’uomo? Ha semplicemente dimostrato la potenza della rete. Le autorità occidentali, che tanto si sdegnano per la censura cinese contro la rete, si comportano esattamente come Hu Jintao, quando la potenza della rete pratica la glasnost, la trasparenza, mettendo a nudo la realtà del potere.

La crisi che inizia simbolicamente il 23 settembre del 2008 con la caduta di Lehman Brothers si presenta come la seconda grande, come una specie di prova apocalittica: o riusciamo a superarla oppure ci affonda collettivamente nella miseria.  Ci si ripete con petulanza che i paesi che fanno le riforme necessaria supereranno il prossimo giro, e quelli che non le faranno rimarranno al margine della storia in una specie di strada senza uscita.

Nos interpelan como ciudadanos

Hoy el ciudadano ya no es un hombre libre. El ciudadano ha dejado de ser el hombre libre que quiere vivir en una comunidad libre. La conciencia política que no se enseña sino que se conquista, ha desaparecido paulatinamente. No podía ser de otra manera. El espacio público se ha convertido en una calle llena de tiendas abiertas a todas horas, en un programa de televisión en el que un imbécil nos cuenta detalladamente por qué se separó de su mujer.

 Una crisis económica: ese es el “momento de la verdad” según todas las teorías críticas heredadas del siglo XX. Y sin embargo, ¿qué pasa? No mucho, o bien un giro derechista, o bien algo que por ahora no vemos con las lentes que tenemos... Yo creo que para ser creíble un lugar de elaboración colectiva y de pensamiento tiene primero que medirse con este no-saber lo que está pasando. Quien no desee pensar, sino entregar su energía activista a otra ilusión (supuestamente) movilizadora ya encontrará otros espacios...